Escuchamos los consejos y hablamos de siempre cuidar nuestro
cutis, que si esta graso, seco o maltratado, por tantas causas que lo provocan.
Nos recomiendan tal crema, un truco o lo que debemos hacer. Pero nadie nunca
nos dijo que cosas no debemos hacer a la hora de preocuparnos en limpiar
nuestro rostro.
Siempre no han enseñado como cuidar nuestro cutis, pero no
que cosas no usar para que este luzca limpio y fresco. Así que como nadie nos comentó
o nos dijo algo acerca de que productos usar o no exagerar en su uso, aquí te
dejo una lista de esos productos, que si los usamos mucho nos pueden causar
daño, toma nota.
No usar el producto apropiado
Elegir una espuma ideal para hacer la limpieza de rutina de
nuestro cutis, debemos de tener en cuenta e tipo de piel que tenemos, ya que en
el mercado existen varios tipos de este producto y no podemos elegir
cualquiera, es por eso que resulta tedioso tener que decidirse por uno. El más
ideal sería uno que quite las impurezas
que causan opacidad en la piel, y que nos deje liso para aplicar la
crema humectante.
No enjuagar correctamente
Esto es muy importante para nuestra piel. Debemos de
enjuagar nuestro cutis con abundante agua, de manera que no quede ningún rastro
de espuma; porque si quedara esto obstruye nuestros poros y causará resequedad.
No tonificar
La mejor manera de aplicarlo es con un algodón, haciendo
suaves movimientos circulares sobre el rostro. Pero uno de los errores es que
siempre se aplica la crema facial justo después de la limpieza, sin antes
tonificar. El tónico nos ayuda a eliminar la suciedad, balancear el PH de
nuestra piel y prepararla para la hidratación.
Abusar de la exfoliación
Aunque es una de las rutinas que nos brinda grande
beneficios, lo recomendable es hacerla una o dos veces por semana, con un
producto para rostro con textura suave. Este pasó nos ayuda a oxigenar la piel,
eliminando la células muertas.
Temperatura incorrecta
Aunque siempre hemos tenido el consejo de enjuagarnos con
agua caliente no dará relajación y bienestar, esta puede ser muy dañina, porque
eliminará los aceites naturales de nuestra piel, ya que el agua caliente reseca
nuestra piel. Lo correcto es enjuagarnos con agua tibia, obteniendo mejores resultados
y, obviamente, no se resecara.
Con estos sencillos pasos que tendrán en cuenta, de seguro,
en adelante lucirás más radiante; y ya no tendrás esa pregunta de porque tu
cutis aún sigue igual como antes si haces una rutina de limpieza diaria, con
estos pasos tu piel cambiara. Y eso es muy acertado, así que es hora que los
sigas y los compruebes tu misma.
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